La Septima Trompeta

Nacido en el barrio Camuy Arriba del pueblo de Camuy, Puerto Rico. Fueron sus padres, la señora Herminia Portalatín y el señor Pablo Ávila, ambos educadores. Estudió en la Universidad Interamericana, de San Germán, donde hizo su bachillerato en Ciencias Naturales y completó su premédica, con miras a continuar estudios en medicina. En 1950 se unió en matrimonio con Carmen Delia Talavera, de cuya unión nacieron sus tres hijas: Carmen Ilia, Iris Noemí y Doris Myrna. Éstas a su vez, le han dado nueve nietos.

Yiye Ávila se destacó en el campo del magisterio, enseñando Química y Biología, por 23 años en la Escuela Superior de Camuy. Practicaba los deportes de baseball y fisiculturismo. Es en el fisiculturismo, donde obtuvo las máximas aclamaciones, siendo proclamado Mister Puerto Rico en 1952 y Mister Norte América, en su subdivisión, en 1954. Al paso del tiempo fue atacado por una artritis reumática crónica que le impidió continuar con su carrera deportiva.

Según él, en 1960 tuvo una experiencia personal con Jesucristo, donde alegadamente fue sanado por Jesucristo. Desde entonces prometió servirle de todo corazón y se convirtió en lo que algunos catalogan como un prominente predicador de la Palabra de Dios, llevando el Evangelio a través de la radio, la televisión y personalmente, por diferentes países de Sur, Centro y Norte América, las Antillas, Europa y Australia. Según sus seguidores sus Cruzadas o Campañas Evangelísticas han causado que millares de personas sean liberadas y sanadas por el poder de Jesucristo. Ha sido recibido por Gobernadores y Presidentes de varios países.

Yiye Ávila cree que el tiempo de los milagros es para hoy, y cree en la obra y manifestaciones del Espíritu Santo; con respecto a esto él llama al pueblo a no juzgar y sí el aceptar la obra de Dios. El evangelísta Yiye cree en milagros creativos, risa en el Espíritu, caídas en el Espíritu, llenura o embriaguez en el Espíritu, danza en el Espíritu, hablar en otras lenguas, sanidades de todo tipo, y todo tipo de milagros.

Actualmente, José Joaquín Ávila (Yiye), ha dedicado cerca de 50 años de su vida al pastorado, al ministerio y al servicio de la humanidad. El ha establecido el Ministerio Cristo Viene en Camuy, Puerto Rico, donde laboran más de 120 empleados y una estación televisiva que transmite el mensaje del evangelio a más de 128 países alrededor del mundo.